Siempre tendré espacio para ti y un abrazo para darte la bienvenida. Sigo siendo tu mamá… Y hasta mi último aliento, seguiré llevando tu amor conmigo. Y agradeceré a Dios todos los días por el privilegio y la alegría de ser llamada TU MAMÁ.
Por siempre y para siempre te amo con mi vida. ¡¡¡Dios te bendiga!!! No te prometo que estaré el resto de tu vida, pero si estaré por el resto de la mía y mientras tenga el privilegio de estar, siempre contarás conmigo porque siempre seré TU MAMÁ.”
ADVERTISEMENT