Uno de los usos más conocidos de los clavos de olor es para calmar el dolor de muelas. El eugenol actúa como un anestésico natural, adormeciendo las encías y reduciendo la inflamación. Muchos dentistas incluso lo utilizan como ingrediente en enjuagues bucales y tratamientos temporales para infecciones.
Mejora la Digestión
Masticar clavos de olor después de las comidas estimula la producción de enzimas digestivas, ayudando a reducir la acidez estomacal, los gases y la indigestión. Además, su efecto carminativo previene la hinchazón abdominal.
Refuerza el Sistema Inmunológico
Gracias a sus propiedades antioxidantes y antimicrobianas, los clavos de olor ayudan a combatir infecciones bacterianas y virales, fortaleciendo las defensas del organismo.
Combate el Mal Aliento
ADVERTISEMENT