Preparación: Asar los Tomates y Chiles: Asa los tomates y los chiles serranos en un comal o sartén caliente hasta que la piel esté chamuscada. Esto puede hacerse también en un horno o parrilla. Pelar y Picar: Una vez asados, pela los tomates y pica los chiles serranos en trozos más manejables. Licuar: En una licuadora, agrega los tomates, los chiles serranos, el ajo, el comino en polvo, la sal, la pimienta negra, el cilantro fresco y el jugo de limón. Licuar hasta Obtener una Mezcla Suave: Licua todos los ingredientes hasta obtener una mezcla suave y homogénea. Ajustar el Sabor: Prueba la salsa y ajusta la sal y el limón según tus preferencias personales. Si deseas más picante, puedes agregar otro chile serrano. Reposo (Opcional): Deja reposar la salsa en el refrigerador durante al menos 30 minutos antes de servir para que los sabores se mezclen. Servir: Sirve la salsa Tlaquepaque como acompañamiento para tacos, carnes asadas, pescado o cualquier platillo que desees resaltar con un toque picante y fresco. ¡Y eso es todo! Ahora tienes una salsa Tlaquepaque casera y deliciosa para disfrutar con tus comidas. ¡Buen provecho!
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