2. Preparar la marinada
En un tazón pequeño, mezcla la miel, la mostaza Dijon y el jugo de limón. Si deseas darle un toque salado, puedes añadir una cucharadita de salsa de soja. Esta mezcla debe ser suave, equilibrada entre lo dulce de la miel y lo ácido de la mostaza y el limón.
Bate bien hasta obtener una mezcla homogénea. Sazona con sal y pimienta al gusto. Puedes ajustar las proporciones de miel y mostaza según tu preferencia de dulzura o acidez.
3. Marinar el salmón
Coloca los filetes de salmón en una bandeja o un recipiente plano y vierte la marinada sobre ellos. Asegúrate de que los filetes estén bien cubiertos por la mezcla. Cubre el recipiente con film transparente y deja marinar en el refrigerador por al menos 20-30 minutos, aunque si tienes más tiempo, una hora sería ideal para que el salmón absorba todos los sabores.
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