La presión excesiva en la zona lumbar puede provocar dolor lumbar.
Si a menudo te despiertas con dolor de cuello o de cabeza, dormir boca abajo podría ser el culpable.
Brazos por encima de la cabeza: circulación comprometida
Algunas personas duermen con los brazos extendidos sobre la cabeza o metidos debajo de la almohada. Sin embargo, esta postura no está exenta de consecuencias:
Compresión de los nervios, provocando hormigueo o entumecimiento en los brazos.
Tensión en los hombros, que puede reducir la movilidad a largo plazo.
Si siente hormigueo frecuente al despertarse, considere reposicionar los brazos para evitar esta compresión.
Posición fetal demasiado encorvada: una trampa para la columna vertebral
Dormir acurrucado es una posición popular, pero acurrucarse demasiado puede ser perjudicial para la salud. Cuando las rodillas están demasiado cerca del pecho y la barbilla está hacia adentro, corre el riesgo de:
Comprime los pulmones, reduciendo así la capacidad respiratoria.
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